Carlos Alcaraz no solo fue determinante en pista para que el Team Europe terminara ganando su primer título de la Laver Cup desde 2021.
El español ganó los dos encuentros que disputó en la jornada definitiva en Berlín, incluido el último ante el estadounidense Taylor Fritz. Además de eso, el actual No. 3 del PIF ATP Rankings fue el cerebro detrás de la planeación de la última alineación del equipo.
“Tuvimos una reunión anoche, y fue muy simple”, explicó Zverev en rueda de prensa. “Carlos entró y dijo: ‘Yo quiero jugar dobles con Casper. Luego Daniil va a jugar sencillos’. A mí me dijo: ‘Tú no vas a perder con [Frances] Tiafoe’. Tenía mucha confianza en mí, ni siquiera yo había tenido esa confianza en mí mismo. Y después dijo: ‘Y yo voy a ganar el partido decisivo’”.
El más sorprendido con la propuesta de Alcaraz fue Ruud, que hasta ese momento había perdido sus partidos en esta edición en Berlín, incluido uno de dobles en la jornada del sábado y ganando apenas tres games. Sin embargo, aliarse con el español lo ayudó a reencontrase con la victoria ante Shelton/Tiafoe al inicio de la última jornada.
“Le preguntamos a Carlos que, si estaba interesado en jugar dobles, con quién se sentiría cómodo jugando, y por alguna razón me eligió a mí”, recuerda el noruego. “No sé por qué me eligió a mí, pero yo estaba feliz. Él sacó lo mejor de mí. Es increíble que siendo tan joven sea capaz de sentirse tan líder en pista”.
Antes del partido decisivo, casi todo había salido como el murciano había esperado. Zverev había batido a Tiafoe en el súper tie-break y dejaba con vida al Team Europa, que ahora perdía 10-11 en el global y quedaba en manos de Alcaraz. Los nervios —bien disimulados al final— fueron una de las mayores amenazas del español.
“Después del partido de ‘Sascha’, era el momento de hacer mi trabajo, tenía que ganar después de esa remontada”, recordó Alcaraz. “Traté de no mostrarle a Taylor [Fritz] que estaba nervioso, y jugué uno de mis mejores partidos hasta ahora. Traté de estar lo más calmado que pude y la energía de los chicos también me hizo sentir con mucha confianza en pista”.
Fue el desenlace soñado para Alcaraz, y para el Team Europa. Incluso conmovió al capitán Bjorn Borg, conocido por su frialdad e inexpresividad.
“Tuvimos problemas, pero estos chicos los superaron de una manera increíble y estoy feliz. Tener este equipo es muy lindo. Estamos muy orgullosos por el espíritu de equipo”, dijo el sueco. “‘Sascha’ y Calritos jugaron un buen partido. Manejaron muy bien la presión”.